¿Cuántos cristianos hay en Nigeria?
Casi la mitad de los nigerianos son cristianos, 98 millones de personas de una población de 211,4 millones, pero la mayoría de ellos se encuentran en el sur del país. El norte de Nigeria es mayoritariamente musulmán, y es en el norte y la región central de Nigeria donde ocurre la mayor parte de los incidentes contra los cristianos.
¿Cómo es la persecución en Nigeria?
Los cristianos nigerianos sufren persecución a causa de un arraigado programa de islamización forzosa, que prevalece especialmente en el norte del país y se ha ido extendiendo gradualmente hacia el sur. Desde que los estados del norte declararon su lealtad a la sharia (ley islámica) en 1999, esta islamización forzada ha cobrado impulso, por medios violentos y no violentos. Los ataques de grupos militantes islámicos han aumentado constantemente desde 2015, pero el gobierno no ha logrado impedir el aumento de la violencia, que afecta a todos los nigerianos, pero especialmente a los cristianos. La violencia es más generalizada en el norte, donde grupos militantes como Boko Haram, ISWAP y militantes fulanis perpetran asesinatos, lesiones físicas, secuestros y violencia sexual a sus víctimas. Los cristianos son desposeídos de sus tierras y medios de subsistencia. Muchos viven como desplazados internos o refugiados. En los estados del norte de Nigeria que aplican la sharia, los cristianos sufren discriminación y exclusión como ciudadanos de segunda clase. Los cristianos de trasfondo musulmán también sufren el rechazo de sus propias familias, presiones para que abandonen el cristianismo y, a menudo, violencia física.
¿Qué ha cambiado durante este año?
La violencia sigue siendo la amenaza más peligrosa y prevalente en Nigeria. Los cristianos siguen sufriendo ataques indiscriminados y brutales en el norte de Nigeria, y la violencia se ha extendido ahora al sur del país. Militantes fulanis y «bandidos» se han asentado en los bosques del sur, dificultando cada vez más el acceso de los agricultores cristianos a las tierras de cultivo. Estos militantes suponen una importante amenaza para las mujeres y niñas cristianas, que pueden ser objeto de acoso sexual y matrimonio forzado. Los secuestros para exigir rescate han aumentado considerablemente en los últimos años, incluido el secuestro de líderes eclesiásticos. Mientras el gobierno persiste en su postura oficial de negación de la persecución religiosa, se siguen violando impunemente los derechos de los cristianos.
«Gracias por orar por mi y apoyarme. Me habéis ayudado a mí y a otros muchos creyentes de Nigeria».
Charity (junio 2022)
¿Quiénes son más vulnerables a la persecución?
La persecución es más severa y prevalente en el norte, donde grupos militantes como Boko Haram, ISWAP y militantes fulanis parecen trabajar cada vez más conjuntamente contra los cristianos, y contra los musulmanes que no apoyan su agenda. Las incursiones en las comunidades cristianas, y otras formas de violencia, hacen que un gran número de cristianos (y otros nigerianos) se vean obligados a vivir en campos para desplazados internos. Las mujeres y los niños son especialmente vulnerables en estos campos. Los niños sufren problemas de salud, y las mujeres y niñas son vulnerables a la trata de personas. Además de la violencia directa, los cristianos del norte de Nigeria son tratados habitualmente como ciudadanos de segunda clase y sufren discriminación y hostilidad. Los cristianos de origen musulmán también sufren el rechazo de sus propias familias, presiones para que abandonen el cristianismo y, a menudo, violencia física. La violencia y la confiscación de tierras no se limitan solo al norte. Los militantes fulanis han trasladado estas prácticas a las regiones del sur, donde han invadido comunidades, aldeas y otras localidades. Sin embargo, la invasión de las comunidades del sur debe entenderse de otra manera. La gente no ha sido expulsada de sus aldeas, sino que, por el contrario, se ha encontrado con que sus bosques y tierras de cultivo han sido tomados por militantes fulanis (y árabes shuwa).
¿Cómo sufren las mujeres la persecución?
La prevalencia de grupos militantes en Nigeria hace que la vida de las mujeres cristianas sea insegura. Boko Haram, la Provincia de África Occidental del Estado Islámico (ISWAP, por sus siglas en inglés), militantes fulanis y otros bandidos armados llevan a cabo incursiones en comunidades cristianas durante las cuales son violadas mujeres y niñas, forzadas a la esclavitud sexual, secuestradas para pedir rescate o asesinadas. Las niñas cristianas son secuestradas para obligarles a casarse y convertirlas a la fuerza al Islam. Incluso antes del matrimonio, se abusa sexualmente de ellas para forzar el embarazo. Esta práctica abominable se utiliza como medio para destruir a las comunidades cristianas. Si la niña es rescatada, sus padres posiblemente la repudien a causa de su embarazo. La etiqueta de «matrimonio» se emplea para enmascarar lo que realmente ocurre, que es la esclavitud. Si los padres intentan rescatar a sus hijas, suelen enfrentarse a la resistencia de la comunidad, la policía y la judicatura, que argumentan que el matrimonio es legítimo según la ley islámica y que la niña ha aceptado el islam. Además de ser «casadas», las niñas secuestradas por militantes han sido usadas como terroristas suicidas o combatientes. Debido a los peligros a los que se enfrentan las niñas cristianas, algunos padres optan por mantener a sus hijas en casa, en lugar de enviarles a la escuela. Aunque esto puede ayudar a mantener a las niñas a salvo, su educación se ve sofocada, lo que tiene graves consecuencias para sus vidas futuras.
¿Cómo sufren los hombres la persecución?
En las zonas rurales del norte de Nigeria, y cada vez más en el sur, los grupos militantes como Boko Haram, ISWAP y militantes fulanis atacan a las comunidades cristianas para eliminar a la actual generación de hombres y niños cristianos, y acabar con las futuras generaciones de creyentes reduciendo la tasa de natalidad. Los hombres que sobreviven a los ataques son obligados a convertirse en soldados de los grupos militantes. La violencia contra las mujeres también se utiliza como arma para dañar a los hombres cristianos. Hombres y niños se han visto obligados a ver cómo sus esposas, madres, hijas y hermanas eran secuestradas o atacadas delante de ellos, lo que les ha causado profundos traumas y sentimientos de impotencia por no poder protegerlas. Los hombres y niños cristianos son marginados estratégicamente de las oportunidades de educación y empleo. Cada vez más, su admisión en escuelas o universidades se ve frustrada a causa de su fe. La combinación de violencia y marginación tiene un efecto devastador en las comunidades cristianas. Si un hombre es asesinado, pierde la posibilidad de trabajar o se le confiscan sus bienes, su familia se empobrece.
Conoce a Agnes
Agnes es una superviviente de un secuestro por Boko Haram (Febrero 2022).
«Estábamos trabajando en los campos de nuestra granja cuando se nos acercaron unos hombres armados. Secuestraron a tres de nosotros. Después mataron a mis dos amigos. Soy la única que sobrevivió».
Agnes
¿Qué hace Puertas Abiertas para ayudar?
Puertas Abiertas trabaja a través de iglesias locales colaboradoras para fortalecer a los cristianos de Nigeria con proyectos de discipulado y capacitación para sobrevivir a la persecución, atención a traumas, ayuda humanitaria y capacitación económica.
Da gracias a Dios por la valiente fe de los creyentes de Nigeria, que se niegan a renegar de Cristo a pesar de los peligros que afrontan.
Ora por el fin de la violencia infligida por grupos militantes en toda Nigeria.
Ora para que los colaboradores de Puertas Abiertas puedan llevar a más supervivientes de la violencia y el secuestro atención traumatológica y capacitación para sobrevivir a la persecución.
Padre Dios, la violencia y brutalidad en Nigeria son inconcebibles. Por favor, intervén para detener estos ataques viles y obra en los corazones de los militantes para que renuncien al odio y se enamoren de tí. Sana a tu pueblo traumatizado por los ataques. Dales nuevas esperanzas para el futuro y los medios para sustentarse económica y socialmente. Obra cambio en el gobierno para proteger a los cristianos, y ayuda al presidente y a los gobernadores de los estados a trabajar con transparencia para encontrar soluciones duraderas a la creciente crisis de seguridad en Nigeria.
